Sesquilé es uno de los ocho destinos escogidos por el Ministerio de Comercio, Industria y Turismo para participar por Colombia en el programa “Best Tourism Villages 2024”, un reconocimiento de la Organización Mundial de Turismo (OMT) a los mejores pueblos para el turismo, alrededor del mundo.

El programa busca visibilizar en el ámbito mundial aquellos lugares tranquilos y naturales para experimentar vivencias más culturales, e incluso con actividades turísticas extremas. 

“El potencial turístico de Cundinamarca es enorme y reside en su riqueza natural y cultural. La OMT lo ha reconocido, pues anteriormente le otorgó el galardón a Choachí, y ahora, tenemos el honor de que Sesquilé se encuentre entre los nominados. Desde el Instituto Departamental de Cultura y Turismo de Cundinamarca (Idecut) felicitamos al municipio y nos unimos para continuar con el fomento del turismo en este Pueblo Dorado”, afirmó el gerente del Idecut, Antonio Hortúa.

Si, en 2022, en desarrollo de la segunda edición de los ‘Mejores Pueblos para el Turismo’, la Organización Mundial del Turismo (OMT) seleccionó a Choachí como el destino colombiano número uno para este fin.

En esta versión, la organización recibió 117 postulaciones, de 19 departamentos colombianos, entre los que se destacaron Sesquilé (Cundinamarca), Puerto Nariño (Amazonas), Jardín (Antioquia), El Cocuy (Boyacá), Orocué (Casanare), Paicol (Huila), Murillo (Tolima) y El Cairo (Valle del Cauca).

Los municipios seleccionados cuentan con menos de 15.000 habitantes, llevan a cabo actividades tradicionales como la agricultura, silvicultura o ganadería y hacen del turismo una forma de compartir valores y estilo de vida de su comunidad.

El municipio de Sesquilé fue fundado por el oidor Luis Enriquez en el año 1.600.

En lenguaje nativo de la cultura chibcha, Sesquilé significa “cabeza”, “agua caliente” o “boquerón de la arrollada”. En la tradición histórica de la cultura sesquileña encontramos una expresión que identifica las cualidades primordiales de sus gentes, de sus costumbres y tradiciones: Sesquilé “Edén alegre de paz”. Le acompañan a esta población leyendas, mitos y tradiciones en torno al “cerro del Covadonga” y de “las tres viejas” donde los ancestros nativos localizaban sus ritos ceremoniales y el culto a los de más allá. Sobresale en este compendio de tradiciones la famosa “leyenda del dorado” que gira en torno al cacique Guatavita, quien acompañado de sus servidores ofrecía a los dioses los tributos representados por el oro, en un baño sagrado dentro de la “laguna del Guatavita”, situada en la vereda Tierra Negra del municipio sesquileño.

Geografía:

Sesquilé se encuentra situado a una altura de 2.600 metros sobre el nivel del mar, con una temperatura de 14ºC; localizado sobre la cordillera oriental al norte de la capital y a una distancia de 42 km. Sus límites geográficos son: por el norte con los municipios de Suesca y Chocontá, por el oriente con los municipios de Chocontá y Machetá, por el sur con el municipio de Guatavita, y por el occidente con los municipios de Suesca y Gachancipá. Su extensión territorial es de 142 Km2, el municipio se halla integrado por 9 veredas, algunas de ellas debido a su extensión y población se dividen en cuartos para una mejor atención administrativa, educacional y pastoral.

Demografía:

La población aproximada es de 10.000 habitantes de los cuales 2.500 viven en el sector urbano y 7.500 en la zona rural.

Economía:

Se basa principalmente en la agricultura, ganadería, floricultura, cultivos de fresas, el comercio y una actividad industrial cada vez más organizada. Las empresas floricultores ocupan un nivel primordial debido a la capacidad de empleo que ofrecen a los habitantes de la región.